Deporte, Salud y Desarrollo en Haití
La Fundación Probitas decidió colaborar el pasado mes de abril del 2014 con la Fundación Nos Petits Frères et Soeurs (NPFS), ‘Nuestros Pequeños Hermanos' (en francés), a través de un programa de deporte y salud para mejorar el desarrollo físico y psicológico de los niños que viven en los hogares de acogida de Kay St. Helene situada en la comunidad de Kensoff, y de las dos hogares de St. Louis y St. Anne (FWAL) de Tabarre, ambas localidades ubicadas en el distrito oeste de Puerto Príncipe, la capital del país. La implantación del proyecto se prolongará hasta el mes de marzo de 2019.

Contexto
La economía de Haití sufrió un duro golpe en enero de 2010, cuando un terremoto de magnitud 7,0 destruyó gran parte de la capital, Puerto Príncipe, y las áreas vecinas. El país es el más pobre del Hemisferio Occidental, un 80% de la población vive bajo el umbral de la pobreza y el 54%, en la pobreza extrema. Siete de cada diez haitianos viven con menos de 2 dólares al día.
En 1987 el Padre William Wasson fundó NPFS, un hogar para niños huérfanos y abandonados en la comunidad de Kenscoff. St Helene es un lugar situado a unos 25 kilómetros colina arriba de la capital de Puerto Príncipe. Este hogar acoge a más de 400 niños y tiene una escuela de primaria y secundaria, entre otras instalaciones. Además, 350 niños de la comunidad de Kenscoff asisten a la escuela. Dentro del complejo de St. Helene también hay otro hogar con más de 30 niños y adultos que padecen enfermedades neurológicas y necesidades especiales.
Los dos hogares FWAL se localizan en Tabarre y se iniciaron para ayudar a las personas afectadas por el terremoto en enero de 2010. Estos hogares acogen 180 niños menores de 14 años. FWAL cuenta con una escuela de primaria para los niños de St. Louis y St. Anne y 600 niños de las comunidades vecinas de Puerto Príncipe y de las ciudades construidas con tiendas de campaña que se asientan alrededor de la capital.
El programa que apoya la Fundación Probitas pretende conseguir una mejora del desarrollo físico y psicológico de los 1.150 niños y jóvenes acogidos por NPFS en las escuelas hogares de kay St. Helene en Kenscoff y los hogares FWAL a Tabarre.
En estos momentos, el programa se encuentra en fase de implantación, pero hasta ahora, esta mejora se ha conseguido por el hecho de haberse completado la primera etapa de formación de entrenadores locales gracias a la presencia de una primera brigada deportiva y sanitaria formada por un equipo de 7 miembros, que se desplazó el mes de abril hasta Haití.
Durante su estancia en el país, la brigada realizó varias reuniones con los máximos responsables de las dos escuelas-hogar, implementó cursos de formación deportiva y sanitaria a entrenadores locales, formó el equipo local entrenador y puso en marcha las primeras competiciones deportivas bajo la supervisión en directo y sobre el terreno de los integrantes de la brigada deportiva y médica. La coordinación y organización del programa deportivo y de salud sigue su ritmo, con la participación de los niños y jóvenes de los hogares Kay. St Helene y FWAL, una vez la brigada de supervisión abandonó el país.
El proyecto
A la espera de que finalice el proyecto, en 2019, los primeros resultados son muy satisfactorios si se considera que se están alcanzando los objetivos planteados inicialmente. Cuantitativamente se ha iniciado el programa con 1.150 niños y jóvenes, pero, a medida que el programa avance, la intención es ampliar el programa a otros centros escolares y hogares localizados en otras áreas de Puerto Príncipe sobre las que el socio local tiene la dirección y coordinación.
De esta manera, se espera, con el tiempo, llegar a una población total de 8.000 jóvenes, pero, de momento, el programa se encuentra en una fase inicial. El proyecto debe madurar todavía pero si se sigue por este camino será posible alcanzar la cifra de 8.000 niños. Por otra parte, aún es muy prematuro evaluar los resultados cualitativos esperados en los niños después de la implantación del programa deportivo y sanitario. Se calcula que en los próximos 6 meses se podrán evaluar más eficazmente los indicadores cualitativos que dirán el efecto final que está ejerciendo el deporte y la salud sobre el desarrollo emocional y físico de la población beneficiaria. Sin embargo, en estos primeros 6 meses se ha conseguido un objetivo fundamental para el buen desarrollo del proyecto: dar inicio a la formación de entrenadores locales y comenzar con los entrenamientos deportivos.